El poema no.50 trata acerca del bien y del mal, mas aun, este poema es una octava real escrita en versos endecasílabos y sin rima alguna. El tema del bien y del mal es un tema cliché pero de gran trascendencia no solo en nuestras vidas sino también en la sociedad, a pesar de esto yo opino que no hay mucho que se pueda decir al respecto pero también pienso que lo poco que se puede decir al respecto es inversamente proporcional en relación con el grado de dificultad que representaría llevar a la practica estas apreciaciones.
En el primer verso se afirma que tanto el bien como el mal pueden ser acciones, pues, esta idea esta ligada a lo que expresa el ultimo verso, es decir, estas acciones se consideran como tal únicamente y en relación al orden social, pues, si estas acciones lo afectan de una manera positiva o negativa, tengamos en cuenta que este orden social se puede ver alterado en distintas proporciones, ya sea a nivel individual o colectivo. Para definir lo bueno o lo malo primero debemos enfatizar que estas definiciones se basan en la ética, y que esta ética tiene como objetivo la excelencia del orden social, si bien esta ética puede ser cuestionada al punto de ser rebatida también es cierto que esto no viene al caso, lo que si viene al caso es que esta ética se establece como un manual de convivencia a escala, es decir, tanto a nivel individual como colectivo, por consiguiente, en el caso de que esta ética fuese rebatida esto seria mas un error de quienes la imparten y no del fin para el cual ha sido diseñada. Ahora confesemos la perogrullada de que siendo parte de una sociedad no queremos dolor sino placer, no queremos pobreza sino fortuna pero que en el transcurso de la obtención de estas delicias nos tropezaremos con los intereses ajenos y que bien puede darse el caso de que estos intereses sean totalmente remisos a cualquier cosa que nos concierna, como también puede darse el funesto caso de que los intereses de una persona transgredan los interés de otra persona sean cuales sean estos intereses y que el hecho de vulnerar estos intereses tanto que se nos vulnere es lo que podemos denominar como maldad, en concordancia, si los intereses ajenos tanto como los propios se nutren por el placer de cualquier índole es lo que podemos denominar como bondad, cabe subrayar que de este hilo argumentativo emerge una pregunta curiosa y es, ¿que seria entonces la conveniencia?, la respuesta a esto es que el bien es conveniente tanto para el individuo como para el orden social, en contraste, el mal no es conveniente ni para el individuo ni para el orden social y que si se da el caso de que el bien o el mal es conveniente para un individuo pero es perjudicial para otro individuo entonces a esto lo llamaremos caos, y lo identificaremos como la razón por la cual existe la ética, no obstante existe la creencia de que el bien se hace sin esperar nada a cambio o incluso a expensas del sacrificio personal, a mi parecer no es tanto el hecho de no ser sinceros con los demás y con nosotros mismos en relación con las posibles segundas intenciones que tengamos al momento de obrar de cualquier manera, sino de que es real la satisfacción que subyace bajo estas acciones, tanto que se puedan considerar buenas o malas y que las formas en que se accede a este satisfacción pueden ser muy diversas, como por ejemplo el caso de la venganza, la venganza tiene por objetivo causar algún mal a una persona que nos ha agraviado, y por supuesto, disfrutar la sensación del desquite, se puede sospechar en estos casos que las venganzas son parapetos que utiliza la gente con una moral mas o menos estricta para desfogar sus impulsos violentos contra los demás, en otras palabras, utilizan la venganza como una excusa para dar rienda suelta a su maldad y no ser victima del remordimiento al que los sometería su moral, a mas de los posibles efectos secundarios sociales que esto le pueda acarrear, en contraste, la moral recompensa con placer a quienes sirven a sus intenciones cuales quiera que estas sean, incluso si el individuo no las tiene del todo entendidas o que estas estén en lo cierto o no de acuerdo a las leyes de la lógica, y castiga con remordimiento a quienes infringen sus principios cualesquiera que estos sean, por lo tanto podemos dilucidar que estas acciones de bondad o son un llamado hedónico o son acciones en pro del orden social, en el caso de que las acciones sean en contra del orden social adrede o inconscientemente estas pueden tener argumentos lógicos o no pero tienen su naturaleza hedonista sea por infringir daño a algo o a alguien o desquitarse a modo de venganza, lo cual también denota la naturaleza hedonista de quien realiza dichas acciones y es en este punto en el que podemos afirmar que es conveniente el placer sea de la naturaleza que sea o que se consiga de la manera que se consiga, y cuando digo de la naturaleza que sea me refiero a que también nos es conveniente otras sensaciones placenteras como la tranquilidad o la felicidad, ya que unos consigan o intenten conseguir dichas sensaciones de maneras mas arbitrarias o metódicas, versátiles o infructuosas es un asunto que no voy a entrar a juzgar, a mas, hay otro caso que es bastante particular y que concierne también a la ética y a lo que es el bien y el mal y es el caso de ir en contra de los propios intereses o atentar contra la propia integridad, un ejemplo de este caso es el de la drogadicción, o casos en lo que esta tendencia llegar a ser mortal.
Otra apreciación del poema es que tanto el bien como el mal pueden ser estados de la mente, de acuerdo a lo anterior convengamos que eventualmente las personas intentan, si es que no lo logran, de dar una apariencia filosófica a su proceder, que este proceder no es una improvisación sino la esencia del mas depurado de los razonamientos, y es que esto ocurre indefectiblemente porque todos queremos actuar de manera coherente o por lo menos hasta donde nuestras facultades lógicas lo permitan y mas aun hasta donde nuestros intereses lo permitan, sin embargo, confesemos que hay situaciones, sea que le suceden al uno o al otro, en que las aptitudes lógicas de las personas hacen que este deseo de actuar de manera coherente o elocuente, si se prefiere, se vuelva complejo al punto de ser odioso por su dificultad de apariencia minimalista, pero nos nos perdamos en digresiones ni en minúsculas apreciaciones y retomemos esa idea del poema que nos dicta que la gente puede actuar de una manera que se considere éticamente como buena y aun así sentirse mala y viceversa, en mi opinión este fenómeno es similar a lo que sucede con el apetito sexual, el apetito sexual es el deseo de consagrarse al coito mas no es el coito mismo, no obstante, algunos perciben la sexualidad como una experiencia de placer pervertido y otros como una experiencia sublime, bien pueden argumentar los lectores que el sexo es el mero coito y que son las personas quienes aportan esa atmósfera de perversión o de su sublimidad, lo cierto es que esto no es mas que la prueba de que son estados de la mente, puesto que se puede afirmar que el mero coito nada tiene de sublime ni nada tiene de pervertido y que toda la atmósfera de degenero y romanticismo existe solo en la mente de quienes la sienten, sin embargo y entre paréntesis cabe decir que si existe lo pervertido y si existe lo sublime como lo es el caso de lo que estamos tratando, que es el bien y el mal, sin animo de alargarme en este apartado tengamos claro que lo pervertido es aquello que se ha desviado de su naturaleza y razón de ser y viceversa, y que en relación con el bien y el mal este apunte de lo pervertido y de lo sublime también entra en lo que es el hecho intrínseco y el estado mental, y que al igual que lo he explicado con el tema del bien y del mal lo pervertido y lo sublime puede sentirse sin que en realidad se este realizando un acto pervertido o un acto sublime. Otra precisión acerca de esta idea del bien y el mal como estados mentales es que se deduce que las personas pueden sentirse en la obligación de sentirse buenas, es decir, que no es suficiente con la mera apariencia y que esto tiene como principio el reproche social como efecto secundario de preservar el orden social o incluso el reproche personal como producto de la moral, es, pues, bastante sensato concluir que esta sensación no es natural sino una reacción a los castigos de la moral, sea que este en lo cierto o no, ahora bien, en relación con la maldad sucede algo similar, la maldad como estado mental o como acción puede aflorar como una reacción ante las restricciones de la moral, como una expresión de rebeldía sea ante las presiones sociales o ante las presiones personales, es elemental concluir que estas reacciones son producto del caos y que la ética no tiene como fin un fenómeno semejante, subrayemos que este caos en tanto a lo mental concierne se debe a principios que no son congruentes con el contexto en el que se desenvuelve el individuo, discrepan con el área cognitiva del individuo, discrepan con el área emocional del individuo a mas que la moral sea cual sea su postura, por ejemplo, estricta con todo lo que son las buenas maneras y los valores tradicionales, o una postura en extremo indolente, vengativa, sarcástica, aun con toda la arenga platónica que se pueda derramar sobre cualquiera de estas dos postura o de cualquiera otra que resultara, puede ser insuficiente y errónea, puesto que no todos los pensamientos positivos son divinos e infalibles o no todo lo siniestro y pesimista es lo que resulta ser cierto a mas que se puede existir en perfecta armonía rodeado de errores de tales dimensiones, como aquellas personas que conviven sin conocerse realmente a base de la mera empatía. Hablando de ética recalquemos que esta tiene como fin el orden social tanto a nivel individual como colectivo pero también recalquemos que esta ética puede y debe cambiar de acuerdo al contexto y que el caos, es decir, la imposibilidad de encontrar soluciones lógicas, dará como resultado las reacciones que acabo de describir, tanto mas y por ultimo, dará como resultado la indiferencia por el caos o las reacciones destructivas, indiferentemente de que se traten de objetivos razonables o mezquinos, tanto que sean situaciones de interés colectivo como personal, subrayemos también que no solo existe una ética diseñada con retazos de la sabiduría popular de Fulano y de Mengano sino también una constitución política, y que si bien se puede dar el caso de que el caos emerja de la inconsistencia de la ética predominante y de la constitución de un estado, también se puede dar el caso bochornoso de que el caos se deba a la mera terquedad, orgullo, incongruencia e incompetencia de la gente tanto como a la de los legisladores o personas que ocupen cargos que incumban situaciones relacionadas.
Prosiguiendo con el tema, otro punto del poema trata acerca de que el bien y el mal bien pueden ser efecto de la incongruencia como ser efecto de la genialidad, de modo que los juicios en este sentido suelen ser un poco patéticos en tanto que es común caer en el error de pensar que si un individuo es bueno esto es por negligencia a la hora de ser malo, de igual manera que se puede pensar que si un individuo es bueno es por supremacía de cualquier índole, en contraste, también se puede pensar que si un individuo es malo esto es por negligencia a la hora de ser bueno y también se puede pensar que si un individuo es malo es por supremacía de cualquier índole, pues, lo cierto es que pueden darse todos los casos, es decir, ser bueno o malo por brutalidad o ser bueno o malo por genialidad, tanto como ser bueno o malo pudiendo ser lo contrario como no pudiendo ser mas que lo uno o lo otro, a mas que se opte por cualquier bando, sea el bueno o el malo por las razones que sea en el caso de que no se pueda ser ni lo uno ni lo otro.
Esta descripción estaría incompleta si no se tratara el punto que versa sobre el porque ciertas personas tienden mas al bien y otras tienden mas al mal, es decir, dejando de lado las personas que tienden a una conducta mesurada en relación con las tendencias hacia alguno de estos extremos, pues, si bien estas tendencias se ven influidas por la ética y por la moral, sea que las que las personas opten por adoptar o infringir la una o la otra o ambas, y por las mas diversas reflexiones, también es cierto que ciertas personas parecen tener una tendencia innata por el bien y otras por el mal, en mi opinión y aunque parezca reduccionista no solo se trata del bien y del mal sino que las personas tienden a todo tipo de cosas con o sin fundamento, de manera innata, como por ejemplo las comidas que se le dan a los bebes y que aleatoriamente aceptan o rechazan o el arte que las personas prefieren indiferentemente de su calidad, mas no se piense por esto que quiera yo insinuar que las diferencias no existen, un ejemplo perfecto para la ocasión es la herencia genética, se puede suponer y con razón que la tendencia al mal o al bien se debe a la herencia genética puesto que no es ningún misterio que un ser vivo de una raza concibe a otro ser vivo de la misma raza, a menos que haya mestizaje en cuyo caso es común que aparezcan rasgos de las razas relacionadas y también es común que los rasgos de una raza predominen por sobre los rasgos de la otra raza o razas relacionadas, no obstante, si bien esto es comprobable y entendido sin mucha dificultad también es claro que este ejemplo no es como la sumas, es decir, valga la excéntrica comparación al decir que de un hombre y una mujer resulta o lo uno o lo otro, no resulta un híbrido mitad hombre y mitad mujer o que entre una persona amargada y una persona muy festiva no resulta una persona mitad amargada y mitad festiva, o que entre dos personas similares en prácticamente todo a excepción de su sexo no resulta una persona similar en prácticamente todo en relación con sus progenitores, y esto es tanto así que se acepta sin lugar a dudas que los seres humanos no conciben animales ni los animales conciben seres humanos, y que si bien esto es cierto también es cierto que el animal aprende a cazar sin tutor ni maestría como un llamado de sus instintos de supervivencia y como un requisito que exige el medio en el que se quiera adaptar y que por supuesto estas habilidades están supeditadas por sus cualidades físicas, en relación a este ultimo punto fijémonos como los bebes aprenden a hablar para comunicarse ademas de entre las muchas otras cosas que se aprenden en esa etapa y que es congruente deducir que justo aprende aquellas que el medio en el que se desarrolla le exigen y que sus cualidades físicas le permiten, de aquí que podamos concluir la no muy brillante teoría de que si otro fuera el contexto en el que el bebe naciera y otras fueran sus cualidades y limitaciones físicas, muy seguramente otras serian sus habilidades y sus torpezas, pues bien, la idea es que si la herencia genética existe también es evidente que los seres vivos adaptan sus cuerpos y sus habilidades al ambiente en el que se desarrollan hasta el punto en el que la naturaleza se los permita, ademas, habiendo hablado de instintos podemos afirmar que todo los seres vivos quieren vivir, es decir, no quieren morir y por lo tanto hay un instinto universal de supervivencia, y esto no solo se limita a la muerte sino también al dolor, el dolor de cualquier índole es el argumento por el cual existe el suicidio el cual atenta contra el instinto de supervivencia pero este suicidio se produce como una salida de emergencia para quienes no pueden poner fin a un tormento y que seguir viviendo es solo alargar una agonía y convengamos que siendo el motivo de este sufrimiento no solo no poder alcanzar ni el éxtasis, ni el placer somero o tan siquiera la tranquilidad sino ser atormentado por cualquier cosa externa o interna, real o no, razonable o no, pues, esto hace que dejar de sufrir sea lo mas hedónico y por lo tanto congruente que se pueda hacer, con respecto a los razonamientos que pueda exponer el suicida en pro de su suicidio puedo afirmar que pueden ser lógicos o no tal como los de una persona que posea todos los supuestos argumentos para vivir y ser feliz, esto nos podría recordar la idea del poema de que el bien y el mal pueden ser solo estados de la mente, mas no subestimemos lo que tanto el orden social como el caos pueden inspirar en distintos caracteres. Es evidente que en el reino animal tanto como el aspecto físico como el carácter es poco diverso o casi idéntico, esto lo digo con animo de retomar el tema de la herencia genética en relación con la idea de que la tendencia hacia el bien o el mal tenga su origen ahí, pues bien, como lo dije anteriormente y como lo ilustre la herencia genética no es como las sumas y que no solo seria obtuso pensar que si los seres humanos conciben seres humanos y los animales conciben animales por lo tanto podamos concluir que si lo anterior es así no hay nada que impida afirmar que sera el mismo caso con el carácter, es decir, que los leones conciben leones y las personas inteligentes conciben personas inteligentes, lo cierto es que en efecto los animales conciben animales y los seres humanos conciben seres humanos pero que si nos centramos en el carácter podemos ver que ciertamente un animal concibe otro animal con un carácter casi idéntico por no decir que igual al de su progenitor pero que no solo es un «argumentum ad logicam» suponer que es así con los humanos, es decir, que un ser humano concibe otro ser humano con un carácter igual o casi idéntico, como el grado de similitud que hay entre la apariencia de los peces o de las flores pero esta vez en relación con el carácter, sino que es evidente que cada persona tiene un carácter propio indiferentemente de el de sus progenitores, sea como una huella digital de su carácter innato, sea por influjo de la sociedad, sea por razonamientos acerca de las mas diversas cuestiones o por todas o algunas de las razones anteriores; es obvio que pueden haber similitudes entre el carácter de un individuo en relación con el de sus progenitores, puesto que se puede ser bueno o malo o a veces bueno y a veces malo, o caer en las excepciones de aquellas personas que llevan alguno de estos dos rasgos a los extremos, osea, las posibilidades que tiene un individuo de tender al bien o al mal se resumen en estas seis posibilidades, por lo que se vuelve una cuestión mas de probabilidades que de genética, como las posibilidades que tiene una persona de ser popular o solitaria o tender a un termino medio entre popular y solitaria, con este ejemplo podemos apreciar de nuevo las posibilidades que en este caso son 3, sin embargo es sabido que hay explicaciones acerca de fenómenos físicos como el miedo o la ira, pero que explicar la ira no explica el temperamento colérico, y que todo puede ser tan sencillo como las ya citadas huellas digitales, sin animo de desmeritar dichos estudios, figurémonos como por ejemplo los homosexuales producen las mismas hormonas masculinas que los hombres heterosexuales, es decir, la testosterona, pero su carácter es femenino o mas exactamente homosexual, otro apunte acerca de como los factores físicos, genéticos o de cualquier otra índole pueden ser la respuesta de porque las personas tienden mas al bien o al mal es el tema de la fisonomía, la fisonomía ha sido postulada desde tiempos pretéritos como un libro abierto que nos habla acerca del carácter de los hombres, pero ciertamente la cotidianidad nos demuestra unas veces que esta en lo cierto y otras veces todo lo contrario y esto es, según mi dictamen, efecto de las probabilidades, dado que o pueden ser buenas o malas, populares o solitarias, despistadas o calculadores, hurañas o afectivas, agresivas o pasivas, etc, por lo que no queda mas que un puñado de probabilidades de las cuales podemos concluir lo que se vaya a concluir, figurémonos y analicemos cuidadosamente el siguiente ejemplo: imaginemos cualquier situación en la cual haya que reaccionar de alguna manera como por ejemplo un robo en un banco, pues, si nos tomásemos el tiempo y las molestia de realizar una lista de mil reacciones ante este misma situación no encontraríamos con el hecho de que es difícil encontrar mil reacciones distintas entre si y en relación con esa misma situación, esto se debe a que sobrepasa las posibilidades obvias, como las que enumere hace poco acerca del bien y del mal, las cuales eran, «ser bueno o malo o a veces bueno y a veces malo, o caer en las excepciones de aquellas personas que llevan alguno de estos dos rasgos a los extremos», pues este factor es lo que hace que realizar una lista de mil reacciones distintas entre si y en relación con una misma situación se vuelva dificultosa, pues he aquí la explicación, ademas que la lista que resulte pueda resumirse a emociones como el miedo o la sorpresa.
Para concluir podemos decir que el bien y el mal pueden ser actos, estos actos se califican como buenos o malos de acuerdo a como afecten el orden social sea a nivel individual o colectivo, se entiende que el bien o el mal pueden ser estados de la mente y también se entiende que se puede ser bueno o malo en concordancia o en contraste con estos estados mentales como lo dice el poema, hacer el bien y sentir el mal o hacer el mal y sentir el bien, como hacer el bien o el mal y no sentir nada, se concluye también que en cuanto a los seres humanos se refiere el rasgo que hace que el mal sea considerado mal es en si la destrucción y el rasgo que hace que el bien sea considerado bien es la creación, sea a nivel físico o mental, por lo que podemos afirmar que la máxima expresión del bien es la creación y la máxima expresión del mal es la destrucción, por consiguiente los estados mentales de bondad y maldad son el estado embrionario tanto del bien como del mal, en el caso en el que se argumente que se pueda crear y destruir sin sentir nada o crear con maldad y destruir con bondad esto es por el prejuicio de lo que se debe sentir cuando se es malo y cuando se es bueno, a mas de la expresión patética a la que pueden llegar tanto la filantropía como la misantropía y que bien pueden estar alejadas tanto de la creación como de la destrucción; los extremos del bien y del mal son justamente mitificados por los efectos que pueden generar en la sociedad pero que en esencia no son distintos a otros fenómenos como la hipersexualidad o el intelectualismo. el hedonismo aparece en este contexto como el argumento de los estados también se puede concluir que la ignorancia o la genialidad no aseguran la tendencia hacia el bien o hacia el mal y que tanto el bien como el mal se pueden justificar pero que ante la sociedad prima el orden social por encima de las conclusiones personales, justificadas o no y prima incluso por encima del caos y lo que resolver este caos pueda significar. Popularmente para dictaminar si un acto es bueno o malo se tiene como factor primordial la intención, esta intención es la que explica el porque el animal no es malo en cuanto caza a otros animales, puesto que su ignorancia lo hace inocente del mal a mas que se trata de su supervivencia en un medio en el que si existiera la ética esta lo justificaría, sin embargo, en la sociedad el asesinato es comúnmente castigado indiferentemente de la ignorancia que en el caso anterior justificaría su inocencia y por último se puede decir que la bondad o la maldad se puede sentir en su máxima expresión sin que teóricamente se apliquen todos los factores posibles que se puedan aplicar a la hora de concebir tanto la bondad como la maldad.